Decíamos en el artículo anterior que tuvimos una experiencia extraordinaria e inolvidable cuando visitamos Rusia con ocasión de la celebración del Mundial de Fútbol, donde nuestra Selección Absoluta y los hinchas tuvieron (tuvimos) participación relevante, ahora nos toca ocuparnos de ellos.

Imagínense estar caminando por las calles de Saransk y ver al fondo una nube de personas que se desplazan hacia el Estadio Yubileyniy, que está al lado derecho de ellos, pensamos que sería un pasacalle de los residentes de esta ciudad, grande fue la sorpresa al constatar que eran hinchas peruanos que en un número nunca antes visto se desplazaban al estadio cantando y alentando a nuestra selección, no nos quedó más que unirnos a ellos y cantar: “Como no te voy a querer, si eres mi Perú querido, mi país bendito que me vio nacer”, en realidad emocionados hasta las lágrimas.

Esa emoción se acrecentó cuando el pueblo de Saransk nos recibió con aplausos, muy alegres, ataviados con los trajes típicos de toda la Federación Rusa, bailando el kasachov. 

Ingresamos al estadio henchidos con orgullo a ver el primer partido de nuestra Selección.

Ya en la tribuna departimos con los amigos, y con los que por primera vez conocíamos, de repente en los altoparlantes una voz en español dice “Homenaje al Perú”, vemos un pequeño video y luego a todo volumen se escucha la canción Contigo Perú, entonada por el Zambo Cavero, y para acompañar, al estilo karaoke observamos sus letras al pie de la pantalla, entonces nuestro segundo himno retumba, el corazón late y a esperar que salgan los muchachos.

Minutos después aparecen los arqueros a calentar, levantan la vista y todo el estadio los aplaude, ellos no podían creer lo que veían, un mar de camisetas blancas y rojas como en Lima, salen los demás jugadores y se produce un estruendo, y gritamos: ¡Somos Locales Otra Vez!.

Antes de iniciar el encuentro contra la selección de Dinamarca, se entonan los Himnos Nacionales, el nuestro nos parece el más hermoso del mundo, el Somos Libres Seámoslo Siempre, llega al alma y cuando termina todos gritamos otra vez ¡Viva el Perú!, en mi vida nunca sentí tanta emoción y orgullo, mi Himno se canta a todo pulmón en un país lejano y yo estoy allí. Amigos recién me di cuenta del verdadero valor de la clasificación de nuestra Selección a un Mundial, es como estar ingresando al Dolby Theatre de Hollywood el día de la entrega del Oscar, y sabes que tú serás el actor premiado, pienso, estoy aquí porque me gané el derecho y nadie lo puede objetar, abran paso que yo represento al Perú.

Nuestra Selección jugó muy bien, un penal errado y una desatención nos costó el partido, pero, la salida desde el área propia tocando el balón hasta el área rival una y otra vez, fue el privilegio de ver en Rusia a una selección diferente de toque fino y vistoso, que nunca renunció a su forma de juego: “el toque peruano”.

Terminó el partido, tristes por la derrota, pero esperanzados por el accionar de nuestra Selección, enrumbamos a Ekaterimburgo para ver el encuentro con la Selección de Francia, nos alojamos en un hotel un poco lejos del estadio, la impresión fue similar que cuando llegamos a Saransk, todos los hinchas peruanos estaban allí, los controles para ingresar al Estadio Central fueron más estrictos, y ya en las graderías, observamos que éramos locales otra vez, sabíamos que el equipo de Francia en el papel era superior al de Dinamarca, pero teníamos la esperanza que nuestra Selección pudiera frenarlos y esperábamos un empate, volvimos a sentir la misma emoción que nos embargó en Saransk, la canción “Contigo Perú” retumbó más fuerte y por supuesto nuestro Himno Nacional fue el cenit, jugando también un gran partido se perdió por uno a cero contra Francia, sabíamos que ya estábamos fuera de la segunda ronda, pero nos quedaba ver el último partido ante Australia, allí tendría que aflorar el honor y ver los goles de nuestros muchachos.

No nos equivocamos en Sochi, la ciudad balneario de Rusia, fue el reencuentro de la Selección con su hinchada y con el gol, vencimos a Australia por dos a cero y nos fuimos a disfrutar en el malecón del triunfo, y porque no soñando que estaremos en Qatar el año 2022.

Mi homenaje al hincha peruano, que desde todos los rincones del planeta fue a Rusia y acompañó a la Selección, mi homenaje y agradecimiento al Comando Técnico, liderado por Ricardo Gareca, y a los jugadores que conformaron el gran equipo que viajó a Rusia y que nos permitió vivir momentos inolvidables.

Madrid, 3 de julio de 2018